El ORI
OLORUM O CIELO
Leyenda de como se separó el cielo de la Tierra:
Según los mitos africanos, el cielo (orun) y la tierra (aiye) no eran separados. Toda la existencia ocurría en un solo nivel y los seres humanos y los Orixás podían transitar tanto en el cielo como en la tierra sin problema alguno.
Después de una transgresión el cielo se separó de la tierra y loS seres humanos no podían visitar más el cielo, la tierra pasó a ser el lugar de los vivos.
Cuenta la leyenda que un ser humano tocó el cielo con sus propias manos, provocando la ira de Olodumaré, el Dios Supremo, que sopló con mucha fuerza y dividió los dos espacios con su hálito (ofurufú), que se transformó en la atmósfera, formando el sanmó - o cielo conocido por nosotros.
Cómo nació el Orí:
ORI en Iorubá significa CABEZA. El Orí está encima de los Orixás, pués ningún Orixá, ni el mismo Olodumaré responde a un pedido de un ser humano, que no haya sido autorizado por por su Orí.
Cuenta la leyenda que los Orixás y ancestros se rebelaron, queriendo tener los poderes y la sabiduría del Dios supremo. Como mensajero nombraron a Exú, que llevó las reivindicaciones a Olodumaré. Éste les envió un poderoso Obi, (semilla africana del árbol de la vida, utilizada para los fundamentos) y orientado por Ifá, determinó que tenían que dejarla la noche entera en un cruce de caminos, los Orixás y ancestros deverían intentar partirlo para mostrar su poder.
Orí era apenas una pequeña bola que no podía conseguir un cuerpo para posarse y nadie lo respetaba. Para conseguir partir el obi, consultaron a Ifá, que les aconsejó jacer una ofrenda para los Odús (conjunto de Orixás) para conseguir la fuerza para todos ellos. Además de eso deberían revolcarse en el polvo por algunas horas.
Al día siguiente todos ya estaban preparados para intentar partir el obi, cuando llegó el Orí, se revolcó en el polvo. Uno a uno los Orixás fueron fracasando ya que el obi era muy fuerte y resistente.
El Orí realizó esto en el último lugar. Se tiró con todo su peso sobre el obi y logró partirlo en seis trosos. Todos quedaron muy felices.
Olodumaré al recibir la noticia inmediatamente envió una linda almohada, donde el Orí se instaló. De esa forma el Orí ganó un cuerpo. Los Orixás y Ancestros exclamaron: ORI APERE!
A partir de ese momento nació el Orí y pasó a ser dotado de Iwa, la existencia, dada por Olodumaré como premio por haber sido el único en conseguir partir el fruto obi.
La Supremacía del Orí:
El Orí está presente en la individualidad de cada ser humano. Representa lo más íntimo de cada uno, es el propio soplo de la vida. El Orí mora en dentro de la cabeza de cada persona, convirtiéndo a cado uno en aquello que es. Como al morir la cabeza de la persona no es separada del cuerpo para su entierro, el Orí puede hacer un viaje sin retorno, pués los Orixás, cuando mueren sus hijos son lebrados de la cabeza (Orí) y retornan al cielo (Orún).
Existe una leyenda sobre el Orí que explica su supremacía sobre los restantes Orixás:
"Un cierto día, Olodumaré resolvió decidir cual de los Orixás iba a ser el dueño del destino del ser humano, siendo así Él convocó a todos los Orixás para oir sus flaquezas decidir cual de ellos sería el más indicado. Cuando todos estaban reunidos, Olodumaré comenzó por Ogum:
Olodumaré: "¿Ogúm si tú estubieses con uno de tus hijos y pasara por una guerra, qué harías?"
Ogum: "Hay padre, yo colocaría a mi hijo en un lugar seguro y lucharía contra los injustos".
Xangó: "Hay padre, uo controlaría los truenos, colocaría a mi hijo en un lugar seguro y saciaría su gula".
Y así se conoció el pensamiento de cada Orixá, hasta que llegó el momento del Orí y respondió:
"infelizmente padre, yo tendré que ser una parte de mi hijo, puñes así como él estaré dividido desde el nacimiento hasta la muerte, porque el día en que yo resuelva separarme, su cabeza será cortada y yo estaría con una misión de Ikú (de la muerte).
ORI ODE es la parte física de la cabeza, esa que miramos o vemos y que llamamos rostro.
ORI INU es la parte espiritual donde se encuentran los pensamientos, es para este Ori que cortamos "num igba Ori", y damos Obi y hacemos ofrendas antes que los mismos Orixás.